Introducción
En el ámbito legal, una de las mayores preocupaciones que pueden tener las partes de un proceso judicial es la posibilidad de que se dicten sentencias en su contra. Existen distintas clases de sentencias que el juez puede dictar en un proceso, y una de ellas es la sentencia interlocutoria. En este artículo nos enfocaremos en definir qué es una sentencia interlocutoria, en qué se diferencia de otros tipos de sentencia y daremos un ejemplo práctico.
¿Qué es una sentencia interlocutoria?
Una sentencia interlocutoria es un tipo de resolución judicial que se dicta durante el desarrollo del proceso, y que tiene por objeto resolver algún tipo de cuestión que se haya presentado en el mismo. A diferencia de las sentencias definitivas, las sentencias interlocutorias no deciden la totalidad del caso, sino solo algunos de sus aspectos.
En concreto, las sentencias interlocutorias tienen como objetivo solucionar cuestiones procedimentales, como por ejemplo: la competencia del juez, el tipo de recurso que deben utilizar las partes, la admisibilidad de un medio de prueba, etcétera.
Diferencias con otras sentencias
La sentencia interlocutoria se diferencia de otros tipos de sentencia que pueden dictarse en un juicio, como la sentencia definitiva o la sentencia cautelar. La sentencia definitiva es aquella que dicta el juez al finalizar el juicio, en la cual se resuelve toda la controversia y se establecen las obligaciones y responsabilidades de las partes. Por su parte, la sentencia cautelar es aquella que se dicta antes de la sentencia definitiva y que tiene por objeto garantizar la efectividad de la sentencia definitiva.
En cambio, la sentencia interlocutoria se emite durante el proceso y su finalidad es resolver cuestiones procedimentales que permitan llevar adelante el juicio de manera más eficiente.
Ejemplo práctico de sentencia interlocutoria
Para comprender mejor lo que es una sentencia interlocutoria, vamos a poner un ejemplo práctico. Supongamos que dos personas tienen un conflicto legal en torno a la titularidad de un bien inmueble. Uno de ellos inició una demanda ante el juez competente, y mientras se desarrolla el juicio, solicita que se realice una pericia contable para determinar el valor del inmueble.
El juez, al recibir esta solicitud, debe dictar una sentencia interlocutoria para resolver la cuestión procedimental planteada por una de las partes. En este caso, la sentencia interlocutoria ordenaría la realización de la pericia contable, ya que esta puede ser de gran ayuda para el juez al momento de dictar la sentencia definitiva.
Conclusion
En definitiva, la sentencia interlocutoria es un tipo de resolución judicial que se emite durante el proceso para resolver cuestiones procedimentales. A diferencia de las sentencias definitivas o cautelares, la sentencia interlocutoria no tiene por objetivo resolver la totalidad del conflicto, sino solo solucionar aquellas cuestiones que se presenten en el transcurso del juicio.
Como podemos observar, la sentencia interlocutoria es una herramienta muy útil para los jueces y las partes del proceso, ya que permite que se resuelvan cuestiones relevantes para el desarrollo efectivo del caso en cuestión.